Esa "iluminada" (más visible en la fotografía de abajo) es Rosa María Calaf, la corresponsal de medio mundo durante los últimos 25-30 años en TVE, en la conferencia que ha impartido hoy 21 de octubre en la Casa Encendida.
Gracias a mis maravillosos medios he podido obtener esta magnífica foto.
Gracias a mis maravillosos medios he podido obtener esta magnífica foto.
Apunté lo siguiente mientras ella nos conferenciaba:
más deportes que internacionales.
no fuentes.
espectáculo.
avalancha y olvido.
información, no comunicación y no debería negocio.
no servirse de sociedad.
responsabilidad de individuos apáticos.
hay que elegir entre echarse a descansar y la libertad
hay que elegir entre echarse a descansar y la libertad
Hasta hoy, para mí apenas era la corresponsal de Asia con un pelo peculiar y un tono de explicar cercano. Esta tarde he aprendido que según un estudio cuyo nombre inglés no puedo recordar, las principales noticias que el público quiere escuchar son las concernientes a "cómo hacerse rico y qué hacer el sábado por la noche".
Además que en la actualidad la mayoría de las informaciones proceden de unas fuentes muy pobres, tanto por cantidad como por calidad. Que la prensa trata un tema como una avalancha de datos durante un corto espacio de tiempo y de repente, chas, desaparece sin dejar rastro.
Además que en la actualidad la mayoría de las informaciones proceden de unas fuentes muy pobres, tanto por cantidad como por calidad. Que la prensa trata un tema como una avalancha de datos durante un corto espacio de tiempo y de repente, chas, desaparece sin dejar rastro.
Que un periodista no debe servirse de la sociedad, sino servir a la sociedad.
También la he escuchado decir que el periodismo que se hace hoy está perdiendo credibilidad por méritos propios, y que deberíamos sacudirnos la apatía en la que vivimos (o dormimos) instalados para utilizar nuestra responsabilidad social y reclamar lo que por derecho deberíamos recibir: una información, veraz, imparcial y global.
Por último, dijo que
todo individuo debe elegir entre echarse a descansar y la libertad.
Hoy he descubierto que Rosa María Calaf tiene mucho que contar fuera de los tres minutos que podía utilizar en el informativo.
Calaf se va a jubilar.